sábado, julio 25

Las diferencias raciales en la Buenos Aires Colonial

Leyendo un libro y un Rollo de las iglesias de Buenos Aires (Catedral de Buenos Aires por Aldo A. Beliera y Distrito Federal , copia del libro de Jauregui Rueda) encuentro anotaciones, que si bien son "comunes" para mi, necesitaban algunas aclaraciones.

Por ejemplo, algunas dudas que surgen es cuando el Cura escribia "españoles" ¿quienes eran?, los llegados desde la lejana España o aquellos que eran blancos? Hasta cuando se uso esa denominacion?

Quienes eran las "gente de servicio"? Los mulatos, negros y esclavos? Los pardos, los pardos libres, los indios?...hayyyy cuanta cosa para buscar..

Veremos si en esta entrada podemos aclarar esto.

Primero debia saber quienes eran denomindaos "españoles" y quienes no y por que.

Aqui me encontre con el primer "quid" de la cuestion, en otras palabras el porque de tanta cosa.

Tendria que ver la raza? Cuantas razas habia en esa epoca?...Veamos,...

Hasta aqui teniamos dos clases de razas (Cada uno de los cuatro grandes grupos étnicos en que se suele dividir la especie humana teniendo en cuenta ciertas características físicas distintivas), o castas (ascendencia y descendencia de una persona; en algunas sociedades, grupo cerrado que constituye una clase especial y se diferencia de los demás por su raza, religión o costumbres. Las castas coloniales hacen referencias a un sistema de estratificación social que tuvo su aparición en los reinos de España en América y Filipinas, a partir del siglo XV) : Españoles e indigenas.

1-Los españoles que llegaron a America, en su mayoria hombres solos (muy solos, piensen que venian de viajar en barco por cuantos meses!) llegaban a estas tierras y se encontraban con las nativas que segun dice el autor Felix Luna :"Los rasgos de los aborígenes no resultaban chocantes, en general, a los ojos de los españoles; el color de su piel no se diferenciaba mucho del cutis aceitunado de los habitantes del sur de la península, y tampoco diferían en estatura, más bien baja en la mayor parte del nuevo continente."

O sea, en pocas palabras los Conquistadores se unieron a las conquistadas.

Asi lo acalara Don Felix Luna: "Más tarde, cuando los indios de las regiones más hispanizadas fueron asimilándose a los modos de vida de los blancos y adoptaron su indumentaria o copiaron su aspecto personal, muchos pudieron pasar por españoles....Fueron escasas las mujeres españolas que vinieron al nuevo continente durante el primer medio siglo a partir del descubrimiento. y bien pronto generaciones de mestizos empezaron a poblar América con su ambigua condición . "

Los de raza o "los de sangre limpia" era entonces españoles y/o blancos, indigenas o negros, los sin mezcla.

Las castas" eran aquellas sobre las que se reconocían como de "sangre manchada", es decir descendientes de personas de "razas" distintas, para el cual el sistema español creo la limpieza de casta,(simplemente pagando)

Agreguemos una tercera clase: Mestizos.

Podemos decir entonces segun el escritor Felix Luna, que se formó una sociedad caracterizada por una gran separación de la nobleza blanca de europeos sometidos a los estatutos de limpieza de sangre y de criollos, que conformaban una minoría de potentados cada vez más exclusiva, derivando, a partir de un sistema de castas para concluir en una aristocracia colonial.

La Pirámide social de las colonias ibéricas era bastante fija, y estaba basada en una clara distribución desigual de la riqueza, el trabajo y la raza. En la cima de la pirámide, con el mayor poder político y económico, estaban los españoles venidos de Europa. Junto a ellos, pero con menor influencia política, estaban los criollos: americanos de "pura sangre" española que generalmente eran latifundistas y tenían pleno acceso a la educación.

En el estrato medio, casi siempre artesanos o pequeños propietarios de tierras, estaban los mestizos.

En escala descendiente había un gran número de otras "castas" o mezclas raciales: mulatos (negro y español), zambos (negro e indígena), etc.

Y luego, en la base de la pirámide y destinados a los trabajos más duros en las minas y la agricultura, estaban los indígenas y los esclavos africanos.

Estas diferencias tambien las encontramos en el desarrollo urbanístico. Las ciudades se organizaban alrededor de una plaza mayor central, donde se hacía el mercado semanal, estaba el palacio de gobierno y la iglesia.

Cerca de la plaza vivían las personalidades más influyentes –autoridades, familias adineradas de españoles o de criollos–, y estaban los conventos y las universidades. En la periferia vivían los ciudadanos de menor categoría: mestizos, mulatos, indígenas.

Las principales castas en America Colonial son:
1) De blanco e indía – mestizo
2) De castizo con blanca –español
3) De indio con negra – zambo
4) De negro con zamba - zambo prieto
5) De español con negra – mulato
6) De mulata con blanco – morisco
7) De español con morisca – albino
8) De español con mestizo – castizo
9) De albino con blanca - salta atrás (Uno de los miembros tenia que tener como abuelo o bisabuelo negro)
10) De indio con mestizo - coyote (También se denomina cholo)
11) De mulato con india – chino
12) De español con coyote – harnizo
13) De coyote con indio – chamizo
14) De chino con india – cambujo
15) De salta atras con mulato – lobo
16) De lobo con china – gilvaro
17) De gilvaro con mulata – albarazado
18) De albarazado con negra – cambujo
19) De cambujo con india - sambaigo
20) De sambaigo con loba – campamulato
21) De campamulato con cambuja - tente en el aire
22) De tente en el aire con mulata - no te entiendo
23) De no te entiendo con india - torna atrás
24) Y más depende de las regiones, el lenguaje y otros.

Fuente:http://www.lariojacultural.com.ar/Nota.asp?id=318

Aclaremos que en esta sociedad, los unicos que gozaban de la plenitud de los derechos y privilegios eran los blancos o españoles europeos o blancos criollos, pues eran la elite del momento. Igualmente dentro de esta elite, habia una diferencia segun donde habia nacido el "español" si en Europa o en America.

Los españoles europeos era de desconfiar de los españoles americanos, no se le daban altos cargos ni honorificos ni lucrativos, lo mismo que en el sector eclesiastico.

Tambien debemos saber que estas "diferencias" eran necesarias para la administracion de la antigua Buenos Aires. Por eso se vieron obligados a realizar Censos o empadronamientos, poniedo el punto sobre las diferencias etnicas.

En el padron de 1726 sobre 73 casas Censadas, dice que hay 64 habitadas por familias con y sin esclavos, jornaleros o agregados. Otras 9 eran habitadas solo por esclavos. No especifica mucho mas. Se agregaban los datos del jefe de familia y quienes vivan con el peor sin datos. En cuato a las mujeres, solo s elas nombraba si eran viudad y cabeza de familia.

Por ejemplo en el Censo de 1822, se ve claramente lo siguiente sobre los habitantes de los 33 cuarteles que formaban la ciudad: patricios, españoles, extranjeros, naturales (indios y mestizos), pardos (mulatos) y morenos (negros).

He aqui la razon de aclarar por el cura en cada libro a que grupo pertenecia.

viernes, julio 24

Dos meses!!
Que alegria! Si, ya dos meses pasaron desde que emprendi esta nueva aventura cibernautica.
El tiempo pasa rapido y dia a dia el Blog se va transformando. Lo que en un principio solo tenia informacion personal, combina ahora datos familiares, historicos, recursos y noticias.
Sigo contando con la ayuda incondicional de Sergio, mi marido y tambien con la grata compañia de mis gatos Caty y Felipe, quienes en estas tardes de frio polar se acurrucan a mi lado.
He aprendido mucho en estos dos meses, y deseo aprender mucho mas.
He leido libros de historia y geografia que en mi vida hubiera imaginado que existian, asi como cuando el Blog recibio la visita de un cibernauta de Moroco...si, Moroco...seguramente como yo tuvieron que leerlo dos veces....Que felicidad!!! 
Se imaginan lo que es ver tantas banderitas distintas en el contador de visitantes??
Por favor, armen su propio Blog el que aun no lo tenga, y los que ya lo tienen..saben lo que les estoy contando!
Espero sus sugerencias y comentarios, que siempre son bienvenidos.
Gracias a todos por sus visitas.
                                                Andrea

Los fortines en Argentina

En Argentina fueron el principal punto estratégico de batalla en la Conquista del Desierto, para esto se construían líneas de fortines que avanzaban dentro del " desierto " (territorio no controlado por los españoles o, luego, por los criollos), ocasionalmente esas líneas retrocedían ante los contraataques de los pueblos aborígenes. En tales fronteras bastante móviles los fortimn solían estar entre sí unas pocas "leguas" (frecuentemente unos 10 kilómetros o – según la medición tradicional de la legua en Argentina – "un par de leguas"), las dos principales líneas de fortines se encontraban una al sur, en la región pampeana y el Cuyo, otra al norte, en la región chaqueña. Hacia finales de 1880 la función de los fortines en la "lucha contra el indio"  la  se volvió obsoleta.


Aunque no parece haber existido nunca un modelo único para todos los fortines, estos solían estar construidos del siguiente modo: emplazados sobre el terreno más elevado, una rústica empalizada de troncos dispuestos verticalmente ("palo a pique") tal empalizada era con frecuencia el único "muro" perimetral, muro de planta rectangular que rodeaba a un recinto de unos 100 a 500 metros², en el interior del recinto se ubicaban ranchos que hacían las veces de cuadras y barracas, tales ranchos generalmente eran: la vivienda de la oficialidad o del comandante fortinero, la barraca de las tropas, un arsenal, una rudimentaria prisión o celda, un depósito de alimentos, un establo, más raramente existían una capilla, una enfermería e incluso una pulpería. Dentro del recinto se ubicaba un corral para la caballada y un mangrullo ( torre de vigía de no más de 10 metros de altura, confeccionada casi siempre con leños y recubierta en ocasiones por un techado de "sacate" ), un pequeño cañón era usado con la pretensión de infundir temor a los posibles atacantes aunque la más de las veces se utilizaban sus salvas a modo de "telégrafo" para dar señales a otros fortines.
El muro perimetral, si el suelo lo permitía, estaba por su parte circundado de un foso lo más ancho y profundo posible como para detener o dificultar la acometida de fuerzas a caballo.
Muchos fortines originaron luego ciudades, por ejemplo Tandil, Bahía Blanca, Villa Mercedes, San Rafael, Morteros, Chascomús, San Antonio de Areco, Chos Malal, Río Cuarto, Banderaló etc.

La vida en el fortín

Para sus habitantes la vida en un fortín no era fácil, la alimentación era mala, estaban mal vestidos y podían ser castigados por cualquier motivo, los soldados ni siquiera tenían la certeza de recibir la paga a tiempo.

Debido a su valor estratégico, los caballos -sin los cuales no se podía salir detrás de los indios- eran más importantes que los hombres. Por las noches, pese a las bajísimas temperaturas, los animales eran los únicos que tenían mantas aseguradas.

Los soldados se levantaban al alba y trabajaban todo el día. Atendían la caballada, fabricaban adobe, cavaban fosas y preparaban la tierra destinada a chacras estatales, al margen de las patrullas cotidianas.

"... Las mujeres de la tropa eran consideradas como fuerza efectiva de los cuerpos -escribió el comandante Manuel Prado en La guerra al malón (Eudeba, l960)-; se les daba racionamiento y, en cambio, se les imponían también obligaciones: lavaban la ropa de los enfermos, y cuando la división tenía que marchar de un punto a otro, arreaban las caballadas. Había algunas mujeres -como la del sargento Gallo- que rivalizaban con los milicos más diestros en el arte de amansar un potro y de bolear una avestruz. Eran toda la alegría del campamento y el señuelo que contenía en gran parte las deserciones. Sin esas mujeres, la existencia hubiera sido imposible. Acaso las pobres impedían el desbande de los cuerpos. "

jueves, julio 23

Casamientos y ...velaciones? Dispensas Matrimoniales?


Segun los decretos del Concilio de Trento, despues del sacramento del matrimonio propiamente dicho se debia celebrar la "bendicion nupcial o las velaciones". Los conyuges solo pueden vivir juntos y tener relaciones sexuales una vez celebrada esta ultima ceremonia.

Fuente:http://redalyc.uaemex.mx/redalyc/pdf/200/20001003.pdf

velación (del l. velatione)
f. liturg. Ceremonia que consistía en cubrir con un velo a los cónyuges en la misa nupcial celebrada inmediatamente después del casamiento.
Diccionario español


Y las Dispensaciones?

Los expedientes matrimoniales que se conservan en los archivos históricos eclesiásticos guardan abundante y muchas veces inédita información genealógica.

Antes de contraer matrimonio, las personas debían probar su soltería y que no tenían impedimentos para casar. Si lo lograban, se casaban y la partida quedaba asentada en los libros matrimoniales de la parroquia en que se celebrara este sacramento (por supuesto, más de un cura olvidaba asentar alguna partida)

Estos trámites estándares generaban un expediente en la parroquia donde se realizaba el enlace matrimonial. Estos documentos son importantes también pues incluyen datos sobre ocupación de los novios y de los testigos, entre otros aspectos (a veces hasta copias de la partida bautismal)

Ahora bien, si las personas tenían algún impedimento, debían realizar trámites especiales para recibir la autorización del obispo para casarse, y el expediente que se generaba es de suma importancia para la historia social pues permite obtener datos de diversa índole (nacimiento, edad, estado civil, consanguinidad, endogamia, viudedad, oficios, relaciones sexuales prohibidas, etc.)

Los principales motivos para solicitar dispensa matrimonial es el parentesco entre los novios; este podía sera de consanguinidad, de afinidad o espiritual.
La consanguinidad de cuarto grado e inferiores debía dispensarse; es decir, si ambos novios compartían, por lo menos, un tatarabuelo, tenían la obligación de solicitar dispensa de consanguinidad (también si compartían un bisabuelo o abuelo).

Dispensa
1 Permiso que autoriza a una persona para el incumplimiento de lo ordenado por alguna ley o norma, especialmente el que concede la Iglesia a sus fieles: pide perdón y suplica dispensa, antes de rendirse a discreción a los verdugos; necesitan una dispensa para contraer matrimonio, porque son tío y sobrina.
2 Documento en el que se expresa este permiso: la dispensa llegó dos días antes de la boda.
Dispensa es privilegio concedido por el Papa o por un obispo.

Diccionario de Uso del Español de América Vox © Larousse Editorial S.L. 2005

Euskaldun herri batzuen izen Zahar eta Berriak

Espero esta lista sea de utilidad para los que buscan en Guipuzcoa


NOMBRE ANTIGUONOMBRE DE HOY, OFICIAL
ABALCISQUETAABALTZISKETA
AGUINAGAAginaga - EIBAR
Aginaga - USURBIL
AGUIÑETAAginaga - ZUMARRAGA
AYAAIA
ALEGRIAALEGIA
ALQUIZAALKIZA
ALZAAltza-DONOSTIA
ALZOALTZO
ALZO MUÑOALTZO
ALZO AZPIALTZO
ALZOLAAltzola - AIA
Altzola - ELGOIBAR
AMEZQUETAAMEZKETA
ANGUIOZARAngiozar - BERGARA
ANZUOLAANTZUOLA
AOZARAZAAozaratza - ARETXABALETA
APOZAGAApotzaga - ESKORIATZA
ARAOZAraotz-OÑATI
ARCARAZOArkarazo - ARETXABALETA
AREANZAAreantza - ARETXABALETA
ARECHABALETAARETXABALETA
ARRONAArroa - ZESTOA
ASQUIZUAskizu - GETARIA
AZCOITIAAZKOITIA
BEDAYOBedaio-TOLOSA
BELAUNZABELAUNTZA
BERASTEGUIBERASTEGI
BIDEGOYANBIDEGOIAN
BOLIVARBolibar-ESKORIATZA
CEGAMAZEGAMA
CERAINZERAIN
CESTONAZESTOA
CIZURQUILZIZURKIL
DEVADEBA
ELDUAYENELDUAIN
ELGUETAELGETA
ELORREGUIElorregi-BERGARA
ESCORIAZAESKORIATZA
EZQUIOGAEzkio-EZKIO/ITSASO
FUENTERRABIAHONDARRIBIA
GAINZAGAINTZA
GALARZAGalartza - ARETXABALETA
Garagartza - ARRASATE
GARAGARZAGaragartza - MENDARO
GAVIRIAGABIRIA
GORONAETAGoroeta - ARETXABALETA
GOYAZGoiatz - BIDEGOIAN
GUELLANOGellao - ESKORIATZA
GUESALIBARGesalibar - ARRASATE
GUETARIAGETARIA
IGUELDOIgeldo - DONOSTIA
ICAZTEGUIETAIKAZTEGIETA
ICHASOItsaso - EZKIO/ITSASO
ICIARItziar - DEBA
ISASONDOITSASONDO
LASARTELasarte-LASARTE/ORIA
LAZCANOLAZKAO
LIZARZALIZARTZA
MACHINVENTAMatxinbenta - BEASAIN
MONDRAGÓNARRASATE
MOTRICOMUTRIKU
OYARZUNOIARTZUN
OIQUINAOikia-ZUMAIA
OÑATEOÑATI
ORDICIAORDIZIA
OREJAOREXA
ORMAIZTEGUIORMAIZTEGI
OSINCHUOsintxu - BERGARA
PASAJES ANCHOPasai Antxo - PASAIA
PASAJES DE SAN JUANPasai Donibane - PASAIA
PASAJES DE SAN PEDROPasai San Pedro - PASAIA
PLASENCIA DE LAS ARMAS SORALUZE
RENTERIAERRENTERIA
REGILERREZIL
SALINAS DE LENIZLEINTZ-GATZAGA
SAN SEBASTIANDONOSTIA
URRECHUURRETXU
URREJOLAUrrexola - OÑATI
VERGARABERGARA
VIDANIABidania - BIDEGOIAN
VILLAFRANCA DE ORDICIAORDIZIA
VILLARREAL DE URRECHUAURRETXU
ZARAUZZARAUTZ
ZARIMUZZarimutz - ESKORIATZA
ZUMAYAZUMAIA


Grados de Consanguinidad

La proximidad el parentesco se establece por líneas y grados.

El grado es el vínculo entre dos individuos formado por la generación.

La línea es la serie no interrumpida de grados. Hay tres líneas de grados: la línea descendente, la línea ascendente y la línea colateral; aunque en realidad habría dos, la línea recta y la colateral, ya que la ascendente y la descendente son una misma, la línea recta.

La línea recta , formada por personas que ascienden o descienden unas de otras (abuelos, padres, hijos, nietos), y colateral, formada por personas que proceden de un mismo tronco común (hermanos, tíos, sobrinos).

El cómputo de los grados de parentesco se realiza de forma distinta según la línea de sucesión:

En la línea recta : Los grados se cuentan subiendo hasta el ascendiente o descendiente común dependiendo de si la línea es ascendente o descendente. Así, en línea ascendente, el hijo dista un grado del padre, dos del abuelo y tres del bisabuelo; en la línea descendente, el abuelo dista un grado del padre, dos del nieto y tres del biznieto.


El la línea colateral: Los grados se cuentan subiendo en primer lugar hasta el tronco común (como en la línea recta) y, en segundo lugar, descendiendo hasta la persona respecto de la que se pretenda establecer el grado de parentesco. Así, el hermano dista dos grados del hermano (el primer grado sería el padre en línea recta que constituiría el tronco común, y el segundo sería el hermano que, como hijo, dista del padre otro grado), tres del tío (el primer grado sería el padre, el segundo el abuelo y el tercero el hijo del abuelo, esto es, el tío), cuatro del primo (el primero sería el padre, el segundo el abuelo, el tercero el tío y el cuarto el primo).

También debe distinguirse entre el parentesco por consanguinidad y el parentesco por afinidad. El primero se da respecto de la propia familia, y el segundo respecto de la familia del cónyuge, computándose los grados de la misma forma.

En el siguiente cuadro se reflejan los grados de parentesco, tanto por línea recta y colateral, como por consanguinidad y afinidad.

Primer grado de consanguinidad                         Primer grado de afinidad
                 Padres                                                         Padres del cónyuge
                  Hijos                                                           Hijos del cónyuge

Segundo grado de consanguinidad                     Segundo grado de afinidad
                    Abuelos                                                      Abuelos del cónyuge
                    Hermanos                                                  Hermanos del cónyuge

                     Nietos                                                                                                                                                                                                                                                        

 Tercer grado de consanguinidad                     Tercer grado de afinidad

      Bisabuelos                                                            Bisabuelos del cónyuge
           Tios                                                                 Tios del cónyuge
       Sobrinos                                                           Sobrinos del cónyuge

Y la Marcha de San Lorenzo???


bueno, aca seguramente encontrare algunas criticas...pero se me eriza la piel cuando escucho una Marcha Militar..., no sé...será porque cuando vivia en otro pais me sentia orgullosa de ser argentina y escuchaba mis cassettes (que antiguedad!) con las Marchas y hasta el Himno!! Se te pone la piel de gallina.

Les cuento de la Marcha de San Lorenzo, sorpresa me lleve. Que cosa, a veces uno se hace la novela con algo y despues nada resulta ser como parece.

LA REALIDAD (o parte de ella):Cayetano Alberto Silva (1868-1920) nació en San Carlos, departamento de Maldonado (Uruguay). Era hijo de Natalia Silva, esclava de la familia que le dio el apellido. Desde niño, reveló una marcada vocación por la música, incorporándose a los 12 años a la Banda Popular de San Carlos, asignándosele el pistón. Integró luego la Banda de Montevideo, recibiendo lecciones de corno y violín de su director Gerardo Grasso. Fue el violín su instrumento preferido. Con el tiempo viajó a Buenos Aires incursionando en el Teatro Colón y asistió a la Escuela de Música dirigida por Pablo Beruti, destacándose ya en la composición. Se trasladó a Rosario donde fur nombrado maestro de Banda del Regimiento 7 de Infantería. Fundó la Banda de San Juan, la de los Regimientos 11, 3, 9, 6 y 15 de Infantería...

Contratado por la Sociedad Italiana de Venado Tuerto (Prov. de Santa Fe) formó y dirigió la Banda de Música local, fundó además un Centro Lírico, enseñó música y creó la "Rondalla" con la que actuó en el Carnaval de 1900. Escribió también la música de las obras para teatro de su compatriota y amigo Florencio Sánchez: "Canillita" y "Cédulas de San Juan". Fue en Venado Tuerto, además, donde, llevado por sus líricos sueños de creador que continuamente acicateaban su prolífica inspiración, comenzó a componer esa música, perfectamente ajustada al género marcial que llevaría por título: "Marcha de San Lorenzo". Había pensado llamarla "San Martín", pero como era conocido del Coronel Ricchieri (ministro de Guerra, en ese entonces) al enviarle la partitura dedicándosela (sin nombre y sin letra), éste le pide que su nombre sea San Lorenzo, en reconocimiento al lugar donde había nacido.
La marcha se interpretó por primera vez en un acto público el 30 de octubre de 1902 en San Lorenzo y en las cercanías del histórico convento de San Carlos, lugar en el que se gestó la batalla entre los Granaderos a Caballo y las tropas españolas. En esa oportunidad el maestro Silvia dirigió la ejecución. Ese mismo día fue designada Marcha Oficial del Ejército Argentino. Dos días después Silva volvió a dirigirla al inaugurarse al Monumento al Gral. San Martín en la ciudad de Santa Fe, con la asistencia del Pte. Julio A. Roca y de Ricchieri.
Cinco años más tarde su vecino y amigo de Venado Tuerto, Javier Benielli le puso la letra alegórica a la victoria de los granaderos. Un poema épico en el que se exalta la figura de San Martín y se rinde homenaje al Sgto. Juan Bautista Cabral, el soldado que dio la vida por su jefe. De allí en más, la marcha recorrió el mundo.
Acosado por la pobreza, el músico vende los derechos de autor a un editor de Buenos Aires, por una ínfima suma.

A partir de 1997, se adoptó para rendir honores al presidente de nuestra Nación.En los institutos de enseñanza se canta la versión escrita por el músico y pedagogo Clemente B. Creppi. Cayetano Silva escribió además, entre otras, las marchas tituladas: "Río Negro", "22 de julio", "Marcha de San Genaro" (en honor a esa población cercana a Rosario), "Curupayti" (inspirada en la Guerra del Paraguay) y "Tuyuti". Estas dos últimas con letra de Benielli.En sus últimos años se radicó nuevamente en Rosario, dedicándose a la enseñanza de la música.
Creó un conservatorio y desempeñó el cargo de director de la Orquesta de la ciudad.
La marcha (a la que en Europa se considera una de la cinco mejores partituras militares de la historia) se hizo famosa y empezó a girar por el mundo, y estuvo presente en momentos históricos fundamentales:.
Fue ejecutada el 22 de junio de 1911 durante la coronación del rey Jorge V con la autorización previa solicitada a nuestro país por el gobierno inglés.
Lo mismo ocurrió para la coronación de la reina Isabel, actual soberana inglesa.
Se ejecuta habitualmente en los cambios de guardia del palacio de Buckinghan, modalidad que fue suspendida en el tiempo que duró la Guerra de las Malvinas.
Fue incorporada al repertorio de bandas militares de Uruguay, Brasil y Polonia, entre otros.
Fue usada como música incidental en algunas películas (alguien dice que en Rescatando al Soldado Ryan).-
El Ejercito Argentino, como muestra de amistad (Y previa al nazismo), le regalo la Marcha de San Lorenzo al Ejercito Alemán y a cambio, en camaradería, este nos regalo la Marcha "Viejos Camaradas" o "Alten Kameraden" o "Ich hatte einen guten Kameraden" una hermosa y marcial marcha que por supuesto la hemos escuchado en numerosas ocasiones en nuestras fiestas patrias.
La Marcha de San Lorenzo fue tocada por los alemanes en París cuando durante la Segunda Guerra Mundial entraron triunfantes por el Arco del Triunfo de esa ciudad.
Curiosamente también el general Einsenhower la hizo ejecutar al ingreso triunfal del ejército aliado que liberara a los parisinos, a manera de desagravio.
La muerte lo sorprendió ocupando un modestísimo empleo en la Policía.
Se le negó sepultura en el Panteón Policial por ser de raza negra, por lo que fue sepultado sin nombre. Afortunadamente, el pueblo de Venado Tuerto reparó tal oprobio al trasladar sus restos en 1997 al cementerio municipal de la ciudad a través de gestiones efectuadas por la Asociación Amigos de la Casa Histórica Cayetano Silva. Casa en la que vivió y es hoy sede del Museo Regional y de la Banda Municipal.


Otra version de la historia
Cayetano Alberto Silva, autor de la "Marcha San Lorenzo" era uruguayo.

Hacía doce años que se había radicado en la Argentina cuando decide, en el año 1899, establecerse en Venado Tuerto. A su llegada se instala en la casa de la calle Maipú 966, acompañado de su esposa y un pequeño hijo.

Hacía tiempo que sus líricos sueños de compositor aguijoneaban su inspiración y trataba de responder a ese imperativo de su sensibilidad. Sobre el pentagrama se dibujaban las notas estructurando en compases la melodía; otras veces, el lápiz implacable tachaba la línea para volver a empezar; pero continuaba con un mandato extraño, como sabedor que el logro final sería una gran obra.

En ese entonces, nuestra comunidad estaba compuesta, en su mayoría, por familias italianas quienes decidieron formar una banda de música confiando su dirección al Maestro Silva. Tiempo después, el sueño se concreta en el mes de abril de 1901, considera que la marcha está terminada y, como lo hacía habitualmente ante cada composición suya, se la hace escuchar a su esposa, Filomena Santinelli la que queda deslumbrada al oírla ejecutada en violín. Cuando la escuchan sus amigos, el entusiasmo es grande y los cerrados aplausos definen la aprobación. Había pensado llamarla "San Martín" pero finalmente decide bautizarla "San Lorenzo" nombre que señala el lugar del combate que tuviera lugar el 3 de febrero de 1813, entre nuestros Granaderos a Caballo y las tropas españolas.

Para la letra, contó con un amigo y poeta, profesor nacido en Mendoza y, en esa época, radicado en Venado Tuerto, Carlos Javier Benielli quien logró componer todo un poema épico en el cual se rinde homenaje al Sargento Juan Bautista Cabral. El autor de la Marcha era conocido del Coronel Pablo Richieri a quien le envía la partitura. El militar, entusiasmado con la obra, ordena ejecutarla en un acto patriótico realizado el 28 de octubre de 1902 en San Lorenzo, oportunidad en que el Maestro Silva, invitado especialmente por el mismo Coronel Richieri, dirige dos bandas militares en la ejecución, siendo ésta la primera audición en público de su obra.

La Marcha "San Lorenzo" ha sido designada Marcha Oficial del Ejército Argentino para rendir honores al Comandante en Jefe del Ejército y pertenece al acervo cultural militar y de la Nación. La resolución respectiva lleva como fecha el 3 de octubre de 1902. Se conoce también que fue ejecutada en Inglaterra para el cambio de guardia del Palacio de Buckingham y en la coronación del rey Eduardo V.

Información copiada del sitio oficial
de la ciudad de Venado Tuerto:
http://www.venadotuerto.gov.ar

Tercera version

Nació en San Carlos el 07 de Agosto de 1868, hijo de Natalia Silva. Desde niño demostraba su interés por la música, motivo por el cual comenzó a estudiar con el maestro Rinaldi. Este docente también dictaba clases de piano y era director de la Banda Popular que existía en ese momento en la ciudad carolina. A los 12 años de edad incorporó a Cayetano en esta Banda, asignándole como instrumento musical el pistón. Al ver los progresos notorios de este alumno y los elogios que sobre él recibía, Jacinta y Emilia Silva (en cuya casa se había criado la madre de Cayetano) se preocuparon por mejorar su educación.
De esta forma siguió sus estudios en la Escuela de Artes y Oficios. A los 16 años, bajo la dirección del Prof. Gerardo Grasso, estudió solfeo y corno; aquí permaneció también estudiando el pistón, el violín por cuatro años más.
En 1888 se marchó a Río Grande (Brasil), donde ingresó a la Banda del Sampaio, buque de la armada brasileña. Luego se marchó a Buenos Aires, donde también se destacó, obteniendo el puesto de maestro de banda en distintos regimientos de infantería. Se trasladó a San Juan donde organizó la Banda de músicos y después a Mendoza en cuyo sitio creó la Banda del Cuerpo de Bomberos. A su regreso aceptó un puesto en Venado Tuerto, para poder mantener a su familia (su éxito profesional no fue acompañado por un buen rendimiento económico). Escribía en los diarios y había comenzado a componer marchas militares, entre las que estaba la Marcha "San Lorenzo"; que dedicó al General Richieri. Terminó de componerla el 1° de Enero de 1902, fue ejecutada por primera vez teniendo como único auditorio a su mujer y a su hija recién nacida. Una casa editora de Rosario, publicó esta marcha gratuitamente y sin pagarle derecho a Silva. La edición fue pequeña pero poco a poco se fue difundiendo con mucho éxito. Como paradoja, su situación económica era desesperante; por ello tuvo que aceptar la propuesta de una casa Editora de música de Buenos Aires. Quienes astutamente por 50 pesos compraron los derechos de la Marcha San Lorenzo; quedando como única propietaria de esta brillante marcha. De esta forma ni su autor ni sus herederos podrían reclamar en un futuro derecho de propiedad sobre esta composición musical. El triunfo de ésta progresó rápidamente, se escuchaba en cuarteles, escuelas y fue elegida para que los soldados británicos desfilaran ante el Rey, en la fiesta de coronación de Jorge V de Inglaterra. Mientras era ignorado, el Secretario de la Embajada Argentina en Londres, tuvo la delicadeza de escribirle una tarjeta de felicitaciones y le adjuntó un programa de la mencionada Fiesta.
Cayetano Silva murió en la sombra y en la pobreza, a los 52 años en Rosario de Santa Fé, en Argentina el 12 de enero de 1920.
Trató de forjar un destino que no rindió sus frutos merecidos, tan siquiera para vivir cómodamente con su numerosa familia, o asegurarles un mejor porvenir. Cuatro años, le llevó a su viuda gestionar y lograr una pensión para ella y sus hijos menores de doscientos pesos mensuales. En 1972, la Municipalidad de Venado Tuerto, Santa Fé, resolvió declarar como lugar histórico la casa de la calle Maipú 966, por haber vivido el MAESTRO CAYETANO SILVA y haber compuesto allí su MARCHA SAN LORENZO.


MÁXIMAS DEL GRAL. JOSÉ DE SAN MARTÍN A SU HIJA MERCEDITAS

(escritas en el año 1825)

1. Humanizar el carácter y hacerlo sensible aun con los insectos que no perjudican. Stern ha dicho a una mosca abriéndole la ventana para que saliese: "Anda, pobre animal, el mundo es demasiado grande para nosotros dos".
2. Inspirarle amor a la verdad y odio a la mentira.
3. Inspirarla a una gran confianza y amistad pero uniendo el respeto.
4. Estimular en mercedes la caridad con los pobres.
5. Respeto sobre la propiedad ajena.
6. Acostumbrarla a guardar un secreto.
7. Inspirarle sentimientos de indulgencia hacia todas las religiones.
8. Dulzura con los criados, pobres y viejos.
9. Que hable poco y lo preciso.
10. Acostumbrarla a estar formal en la mesa.
11. Amor al aseo y desprecio al lujo.
12. Inspirarle amor por la Patria y por la Libertad

San Martin y sus Granaderos


El proximo 17 de Agosto se conmemora en Argentina un nuevo Aniversario del fallecimiento del General Don Jose de San Martin, reconocido como el Padre de la Patria.
Se nos ha enseñado mucho sobre el, su trabajo, y su familia. Sabemos con quien se caso, y conocemos tambien a su hija Merceditas...pero que sabemos de los valientes Granaderos???
Por mi parte , casi nada...asi que comienzo a investigar y a compartir con ustedes

http://www.youtube.com/watch?v=xP2TE_odqfU&feature=related
El 16 marzo de 1812,el gobierno superior provisional de las Provincias Unidas del Río de la Plata, con las firmas de Chiclana, Sarratea y Rivadavia, expide el nombramiento efectivo de José de San Martín como Teniente Coronel de caballería y “Comandante del Escuadrón de Granaderos que ha de organizarse”, el que sería a lo largo de la tenaz lucha emprendida contra el poder real, el alma y el cuerpo vertebral del éxito del pronunciamiento revolucionario.

Para la concreción del mismo, San Martín había expuesto detalladamente ante el gobierno la necesidad de formar un cuerpo modelo, donde privara la calidad humana de sus integrantes sobre la cantidad, de tal manera que dotándolo de un espíritu, fuera el núcleo de un ejército disciplinado y moderno, capaz de combatir con todas las probabilidades de éxito contra las veteranas fuerzas del rey.

Además, la aguda percepción político-militar sobre su patria, de su territorio, de sus posibilidades, de la idiosincrasia y aptitudes de sus habitantes, como de la extensión de sus líneas de operaciones le señalaban, sin ninguna duda, la materialización de esa idea en un cuerpo de caballería, que ya en los campos de batalla de Europa había demostrado todo su valor y potencialidad

Formaron en el núcleo inicial de aquel escuadrón, que sirviera de base para la integración del regimiento, el cual puede darse por constituido como tal en mayo de 1812, los siguientes jefes y oficiales:

En la plana mayor como Comandante el Teniente Coronel don José de San Martín;
el Sargento Mayor don Carlos María de Alvear;
el Ayudante Mayor don Francisco Luzuriaga
y el Portaguión don Manuel Hidalgo.

El escuadrón, dividido en dos compañías, estaba integrado así:
En la primera el Capitán don José Zapiola,
el Teniente don Justo Bermúdez
y el Alférez don Hipólito Bouchard.
En la segunda el Capitán don Pedro Vergara,
el Teniente don Agenor Murillo
y el Alférez don Mariano Necochea.(mi ciudad lleva su nombre) 
(figuran nombres que después, con el correr del tiempo, se harían ilustres en la historia de la patria).
En total, el número de efectivos del escuadrón era de dos jefes, ocho oficiales, nueve sargentos, un trompeta, tres cabos y treinta y un granaderos.

Selección del personal

La política de selección del personal, extremadamente rigurosa en los cuadros, se extendió también al de los reclutas, consignándose, por ejemplo, en la nota remitida al señor Doblas, con fecha 18 de agosto de 1812, que se trasladase “… a Misiones con el objeto de extraer trescientos jóvenes naturales de talla y robustez, con destino al Regimiento de Granaderos a Caballo al mando del teniente coronel don José de San Martín, oriundo de aquel territorio…” …cuya intención revelaba desde un principio el valor que se asignaba a la relación del terruño con el jefe para acrecentar el espíritu del cuerpo.

Aquella orden no pudo cumplirse por varias circunstancias, recurriéndose a la incorporación de reclutas de diversas provincias con un criterio de selección sumamente exigente, que tan buenos resultados daría luego en la práctica.

La larga experiencia en la carrera de las armas había convencido a San Martín del valor imponderable del ejemplo, como base para cimentar la educación e instrucción de la tropa. El general Espejo, testigo presencial, detalla todo este severo aprendizaje:

“Bajo este sistema, sostenido con perseverancia y hasta con vigor -dice en sus Memorias sobre el Paso de los Andes- se verificó la enseñanza de todos y cada uno de los soldados de ese cuerpo, debiendo añadir que no era una enseñanza de mera forma ni que el jefe u oficiales tolerasen algunas pequeñas faltas de ejecución, no señor. No se pasaba de una lección a otra mientras no se viera perfecta y bien ejecutada la anterior. Que las lecciones enseñaban, y si causa se observa sin excusa ni pretexto de ningún género, hasta que todas y cada una de las posiciones y movimientos de táctica se arraigaban como hábito en los hombres.

“Así es que los soldados educados en la escuela de San Martín eran entonces y han sido después un modelo digno de ser imitados, por su gallarda apostura, sus airosos movimientos y su arrogante despejo, tanto en las funciones militares cuanto en las civiles y sociales.

“¿Y qué diremos acerca del aseo personal y la uniformidad del traje? baste decir, que era tan sostenido y escrupuloso su cuidado como lo había sido el de la instrucción.
No se toleraba una manchita en el uniforme, ni un botón no bien limpio.”

Exigente al extremo consigo mismo el Jefe del Regimiento de Granaderos estableció un código de honor al cual debían ajustar su conducta todos los oficiales, sin excepción y sin miramientos, con el objeto de preservar, juntamente con la disciplina, armazón de toda organización militar, el honor que es el alma de todo soldado y de todo cuerpo.

Es de mucho interés transcribir la lista de los “delitos por los cuales deben ser arrojados los oficiales” por cuanto proyecta, con caracteres firmes y definidos, la razón de ser de aquella conducta ejemplar que caracterizó siempre a sus cuadros, en toda la Guerra de la Independencia, por la vasta amplitud americana.

Se reputaban delitos:
1º Por cobardía en acción de guerra, en la que aún agachar la cabeza será reputado tal.
2º Por no admitir un desafío, sea justo o injusto.
3º Por no exigir satisfacción cuando se halle insultado.
4º Por no defender a todo trance el honor del cuerpo cuando lo ultrajen a su presencia o sepa ha sido ultrajado en otra parte.
5º Por trampas infames como de artesanos.
6º Por falta de integridad en el manejo de intereses, como no pagar a la tropa el dinero que se haya suministrado para ella.
7º Por hablar mal de otro compañero con personas u oficiales de otros cuerpos.
8º Por publicar las disposiciones internas de la oficialidad en sus juntas secretas.
9º Por familiarizarse en grado vergonzoso con los sargentos, cabos y soldados.
10º Por poner la mano a cualquier mujer aunque haya sido insultado por ella
11º Por no socorrer en acción de guerra a un compañero suyo que se halle en peligro, pudiendo verificarlo.
12º Por presentarse en público con mujeres conocidamente prostituidas.
13º Por concurrir a casas de juego que no sean pertenecientes a la clase de oficiales, es decir, jugar con personas bajas e indecentes.
14º Por hacer un uso inmoderado de la bebida en términos de hacerse notable con perjuicio del honor del cuerpo.

El culto exagerado del valor y del honor, la exigencia imposible en la instrucción, la persistencia constante en el duro aprendizaje físico, la férrea disciplina, el orgullo ilimitado de ser granadero, la altivez en la mirada, en el gesto o en el hablar, fueron el basamento que cimentaba a aquellos hombres, educados nada menos que en una misión, sin otra alternativa que la victoria o la muerte.

Con fecha 11 de setiembre de 1812 se crea, por decreto, el segundo escuadrón, y el 5 de diciembre de ese mismo año, con las firmas de Rodríguez Peña, Alvarez Jonte y de Tomás Guido como secretario interino de Guerra, se dispone la formación del tercer escuadrón.

En la misma forma como se había procedido al crear el Cuerpo, es recién con el decreto ascendiendo a Coronel a San Martín, con fecha 7 de diciembre de 1812, que se usa por primera vez el nombre de Regimiento.

“Atendiendo a los méritos del Comandante don José de San Martín ha venido a conferirle el empleo de Coronel del Regimiento de Granaderos a Caballo, concediéndole las gracias, exenciones y prerrogativas que por este título le corresponden.”

Posteriormente, con fecha 5 de mayo de 1812, con la firma de Miguel de Azcuénaga, se ordena que… “… queda puesto a disposición del Comandante del nuevo escuadrón de Granaderos a Caballo, el cuartel que ocupa en el Retiro el Regimiento de Dragones de la Patria; y lo aviso a V.S. en contestación a su oficio de ayer en que me comunica haberlo ordenado así el Superior Gobierno.”

Esta zona era conocida desde la época de las invasiones inglesas como Cuartel del Retiro, siendo su ubicación aproximadamente la zona que bordea la actual plaza San Martín (Arenales y Maipú).

Frente al mismo Regimiento, ante la curiosa mirada de los habitantes de la zona del Retiro, se realizaban diariamente las prácticas en el llamado “Campo de la Gloria” denominado luego de la Revolución de Mayo, como “Campo de Marte.”

No había transcurrido un año desde su creación cuando el 3 de febrero de 1813 tocaría al regimiento recibir su bautismo de fuego allá en San Lorenzo, a orillas mismas del Paraná.

Fuente:                                                                                                                                                                                                                                                                                                                            Leoni, Luis - Historia de una epopeya - Instituto Nacional Sanmartiniano                                                                                                                                                    Urueña, Pedro Alberto - Asociación de Granaderos Reservistas de la República Argentina                                                         www.revisionistas.com.ar




Los 18 registros civiles de Asturias


(Aclaracion: esta noticia tiene un par de meses)

Concluye la digitalización de los 18 registros civiles de Asturias

Archivado en: justicia, interior, economía, informática, digitalizacion, asturias
EFE
Actualizado 29-04-2009 12:57 CET

Oviedo.- Los Ministerios de Industria y de Justicia han finalizado ya la digitalización de los dieciocho registros civiles de Asturias, lo que ha supuesto realizar este proceso con 3.365 manuscritos y con algo más de dos millones de páginas.




Según ha informado el Gobierno, esta iniciativa, realizada a través de red.es y cofinanciada con fondos FEDER, ha afectado a todos los libros manuscritos desde 1950 y permite una mejora en la operativa de los registros y en el servicio prestado al ciudadano.

Así, por ejemplo, la certificación de la partida de nacimiento requerida para la obtención del DNI se podrá realizar ahora en un solo día y no en dos visitas como ocurría antes.

El Programa también está permitiendo que otros organismos como la Seguridad Social, la Dirección General de la Policía o la Agencia Tributaria puedan acceder -con autorización del ciudadano- a la información necesaria para la tramitación de sus procedimientos, como puede ser el pago de las pensiones o los cheques cuna.

Registro Civil en Línea se puso en marcha en mayo de 2006 y está dirigido a la totalidad de los 8.109 registros que hay en España, de los cuales 432 son registros civiles principales y 7.677 municipales delegados en juzgados de Paz.

En una primera fase se han informatizado y conectado todos los registros civiles para proceder a la digitalización de los libros manuscritos desde 1950 hasta la actualidad.

La digitalización de los registros civiles ya ha concluido en las comunidades de Castilla la Mancha, Ceuta, Extremadura, Galicia, Melilla y Murcia y está muy avanzada en Andalucía, Castilla y León y Comunidad Valenciana.

Ahora comenzará la segunda fase, que implica la digitalización de los registros del resto de comunidades autónomas.

Red.es es la entidad pública empresarial dependiente del Ministerio de Industria encargada de ejecutar determinados proyectos para el impulso de la Sociedad de la Información interactuando con Comunidades Autónomas, Diputaciones, ayuntamientos y sector privado en materia de Tecnologías de la Información y la Comunicación (TIC).

miércoles, julio 22

Catedral de Buenos Aires


Nombre latino: Bonus Aër. Archidiocesis Bonaërensis.
Erección canónica: Diócesis: Bula de S.S. Paulo V (30 de marzo de 1620)
Ejecución de la Bula: 19 de enero de 1621 por Fr. Pedro de Carranza, primer Obispo de Buenos Aires.
Arquidiócesis: Bula de S.S. Pío IX (5 de marzo de 1865).
Sede Primada: Decreto de la S.C. Consistorial (hoy S.C. para los Obispos) del 29 de enero de 1936.
Institución civil: Real Cédula de S.M. Felipe III, Rey de España, del 12 de junio de 1618 pidiendo la erección de la Diócesis. Ley nº 116, de 1864, como Arquidiócesis.
Personería Jurídica: Código Civil de la República Argentina. Art. 33, inc. 4º.
Territorio: Capital Federal e Isla "Martín García".
Superficie: 202 km² . Isla "Martín García": 17 km².
Titular de la Arquidiócesis: Santísima Trinidad.
Santos Patronos. Principal: San Martín de Tours (11 de noviembre) y Nuestra Señora de las Nieves (5 de agosto).
Menores: Santa Clara (12 de agosto) - Santos Sabino y Bonifacio (14 de mayo).
Titular de la Catedral: Santísima Trinidad.

Cuando Juan de Garay vino desde Asunción a fundar la ciudad de la Trinidad, acto que tuvo lugar el 11 de junio de 1580, destinó para la iglesia mayor o catedral el mismo cuarto de manzana que ocupa hoy en día. En el acta de fundación se lee: "hago y fundo en el asiento y pueblo una ciudad la cual pueblo con los soldados y gente que al presente he traido para ello, la iglesia de la cual pongo por advocación de la Santísima Trinidad, la cual sea y ha de ser iglesia mayor parroquial". En lo que atañe a la jurisdicción eclesiástica, la nueva ciudad dependía de la diócesis del Río de la Plata, creada por Paulo III el 1º de julio de 1547 con sede en Asunción.
La iglesia parroquial era una modesta construcción con tapias de adobe y madera, que en 1605 el gobernador Hernandarias mandó demoler por muy vieja e indecente. Ignoramos qué proporciones tendría la que se levantó en su lugar con madera traída expresamente del Paraguay. Años más tarde, en 1616, su techumbre amenazaba desplomarse y la parroquia tuvo que pasar a la iglesia de San Francisco.

Y mientras se hacían proyectos para reformarla, solicitando para ello la contribución pecuniaria de los fieles, la iglesia acabó de derrumbarse porque estaba mal edificada y con madera podrida de sauce. Esto era en 1616. Ni el Cabildo, Justicia y Regimiento de la ciudad perdieron el ánimo y enseguida fletaron una embarcación al Paraguay para adquirir y traer la madera necesaria para la reedificación del templo. Las obras se iniciaron en enero de 1618. Según el presupuesto de Pascual Ramírez que las llevaría a cabo, su costo sería de 1.100 pesos. Sobre la recaudación del dinero carecemos de información exacta, pero sí sabemos que a finales de aquel mismo año la obra del templo estaba concluida. Pero se ofrecía una dificultad: éste resultaba más pequeño que el anterior, tanto que en 1621 ya se hablaba de construir otro destinado a catedral.

Entre tanto, en Madrid y en Roma se llevaban a cabo los trámites para la creación de la diócesis de Buenos Aires. La bula de erección canónica por Su Santidad Paulo V está fechada el 30/3/1620 y su ejecución tuvo lugar el 19/1/1621 por su primer obispo el carmelita Fray Pedro de Carranza, lo cual quiere decir que en esa fecha tomó posesión de la diócesis. El obispo señaló como catedral la única iglesia de clérigos que había en la ciudad. Y en su carta de 4 de mayo de ese mismo año escribía al rey: "está tan indecente (la catedral) que en España hay lugares en los campos de pastores y ganados más acomodados y limpios; no hay sacristía, sino una tan vieja, corta e indecente, de cañas, lloviéndose toda con suma pobreza de ornamentos".
Y más adelante: "El Santísimo Sacramento está en una caja de madera tosca y mal parada". "Y en cuanto toca al edificio, es forzoso el entablarla y acomodarla, so pena de que dará toda en tierra y nos iremos a una Iglesia de un convento a hacer catedral". Y en el auto de erección del 12/5/1622 dejó escrito: "Sin coro ni sacristía a propósito, la cubrimos de nuevo y retejamos e hicimos sacristía nueva y coro y pusimos pila de agua bendita en medio de la iglesia y trajimos de España, con limosnas que su majestad dio y nosotros en parte tafetanes de colgadura y ternos y otros adornos para servicio del culto divino e hicimos fuera de esto, donación a la catedral de dos cuadros grandes con guarniciones doradas, el uno del glorioso San José, y el otro de la Magdalena". Además, instituyó dos cofradías: la del Carmen y la de Esclavos del Santísimo Sacramento. Esta fue, pues, la que podemos denominar la primera catedral.
Cuando el tercer obispo de Buenos Aires, Fray Cristóbal de la Mancha y Velazco llegó a su sede el 6 de octubre de 1641, halló a la catedral, si no en estado ruinoso, por lo menos muy deteriorado. Así que concibió de inmediato la idea de levantar una nueva catedral y se lo comunicó al rey el 19 de noviembre de 1662. Según el plano que le adjuntó, el templo iba a tener tres naves; para su construcción se necesitarían 5.000 pesos, suma que solicitaba del real tesoro. En la persona del excelente gobernador, don José Martínez de Salazar halló el obispo quien colaboraba en la construcción del templo no sólo con su influencia, sino hasta con dinero de su propio peculio. En 1671 la catedral estaba terminada: constaba de tres naves, su techo de madera y una torre; era de proporciones regulares.

Pero he aquí que una obra con tantas apariencias de solidez, al cabo de siete años, por causa de la calidad inferior de algunos materiales usados en su construcción, empezó a dar muestra de su ruina inevitable: esta es la segunda catedral.


El año 1678, el nuevo prelado, Antonio de Azcona Imberto se dirigió al rey haciéndole presente la urgencia en la reparación de la catedral, y solicitando la suma de 12.000 pesos. Su majestad acudió a la demanda, de tal manera que en octubre de 1680 se dio comienzo a las obras. El historiador Rómulo D. Carbia comenta: "El peligro estaba en el techo y tenía su origen en que no se le había dado la corriente que exigía la frecuencia y la abundancia de las lluvias. La iglesia goteábase toda, y ello se debía a que los canales que corrían en todo lo largo del edificio, sobre los arcos que dividían las naves laterales y que tenían por objeto recibir las aguas de la nave principal, habían sido construidos con poca capacidad y malos materiales, al punto de producir continuas filtraciones". Pero aquí surgieron otras dificultades, porque el techo se desplomó, se destruyó a consecuencia de ello el retablo del altar mayor y se impuso la demolición de la torre por la gravedad de su deterioro.
Su reconstrucción marchó muy lentamente, sobre todo por razones de orden económico. A pesar de ello, en 1690 la iglesia con sus tres naves estaba cubierta, aunque todavía faltaba adecentar su interior y por la parte de fuera sus capillas, la sacristía y había que elevar la torre que hasta entonces sólo contaba del primer cuerpo. Para hacer frente a todos los gastos se echó mano de todos los medios disponibles: la real hacienda, el obispo con sus rentas y alhajas, el vecindario con sus limosnas. La obra siguió adelante, pero por las sólitas dificultades económicas, al fallecer el obispo el año 1700 aún no estaba concluida. Y esta fue la tercera catedral.
Su sucesor fue el trinitario fray Pedro Fajardo, apostólico y santo prelado, que como es de suponer puso todo su empeño en la conclusión de las obras de la catedral. En carta de 20 de agosto de 1721 comunicaba el obispo al rey que ya se había dado cima a una de las torres y estaba interesado en levantar la segunda.

Pero al año siguiente –1722- la techumbre del templo se iba deteriorando de tal modo, que se temía su derrumbamiento. Enfermo y en cama, el obispo pidió al Cabildo Eclesiástico que se hiciese cargo de la obra. Ya se supone que la primera dificultad que se presentó fue la carencia de recursos económicos.


El Cabildo, en tal coyuntura, dirigió un exhorto a los miembros del Ayuntamiento a quien competía, también, poner manos en ese asunto. Pero por un motivo u otro –algunos verdaderamente fútiles- se pasaron dos años sin que se hubiera adelantado nada. Entonces es cuando surge la figura del arcediano Marcos Rodríguez de Figueroa y con él las cosas entraron por la vía recta. A su actividad y celo por la causa de Dios se debe la terminación de la obra de la catedral. Para ese efecto, la real haciendo puso 1.800 pesos y él 3.000 de sus propios haberes; el arcediano consiguió 1.500 del vecindario e hizo un empréstito de 2.500 y 1.000 provinieron del cabildo secular. ¿Qué se consiguió con el monto de estas sumas? Terminar con el trabajo de las torres, arreglo de las naves y el del pórtico; además, en 1725, un tal Tomás Trupp, hizo una donación de 5.000 pesos para las campanas (cinco campanas!). Y ésta fue la cuarta catedral.



Al morir Fray José de Peralta, se reunió el Cabildo y eligió vicario capitular al Dr. Bernardino Verdún de Villaysán, una de cuyas principales ocupaciones –y las del Cabildo- fue el mejoramiento de la catedral. Como primera providencia, tanto el vicario capitular como el Cabildo, hicieron traer de Potosí 400 libros de oro y los elementos necesarios para hacer dorar el retablo; luego se ocuparon de blanquear la sacristía mayor, los pilares del cañón principal, de todas sus capillas y del bautisterio; se cerraron los tres arcos que se hallaban bajo la torre, "así por hallarse sin abrigo –dicen los documentos- y expuestos a los vientos y polvos que perjudica mucho al aseo de la Iglesia, como porque el Señor gobernador, las reales juntas, el teniente de sacristán mayor, que vive en uno de los accesorios, y otras personas temerosas de Dios tienen informado que sirve, de noche, de abrigo de liviandades". Hermoso eufemismo del lenguaje de la época! Además de ello, el Cabildo se ocupó en hacer alargar el presbiterio, ensanchar la mesa del altar mayor, cuyo retablo compuso en sus dos caras: tampoco olvidaron los señores canónigos la sala capitular y el archivo, que se preocuparon de ordenar y componer según las normas de la época de tal manera que no sufrieran deterioro los documentos y papeles que en él se habían de guardar. El Cabildo tuvo que sufragar los gastos que traían consigo estos arreglos y adecentamientos. Un vecino de la ciudad, nombrado Agustín de García, donó 500 pesos para el dorado y pintura al óleo del coro principal. Y ésta es la quinta catedral.
La actual Catedral. Parecía que la quinta catedral iba a ser la definitiva Pero por desgracia no fue así. Porque a las 9 de la noche del 23 de mayo de 1752 se derrumbó una parte de la catedral y entre las seis y la siete de la mañana del día siguiente se desplomaron, según informe del gobernador José de Andonaegui "las tres bóvedas de iguales naves". Y el obispo, don Cayetano Marcellano y Agramont informaba al rey que fue preciso "derribarla enteramente por la poca firmeza de las paredes que han quedado y empezar su fábrica desde los cimientos con más solidez y extensión que los de la antigua, que por su cortedad no parecía catedral, y a juicio del más acreditado alarife pasará su costo de doscientos mil pesos por el subido precio de los materiales en este puerto" y terminaba pidiéndole "se sirva aplicar a tan útil y necesario edificio la cantidad de dinero que arbitre su real clemencia…"


La burocracia en aquellos tiempos era tanto o más complicada que la de ahora. Y así fue como este asunto se pasó al Virrey del Perú, a la vista del fiscal, a la real audiencia. Por ello, transcurridos tres años, sin contar con la autorización real y sin haber enviado los planos para su autorización, y con el total apoyo del Cabildo Eclesiástico, empezó el obispo a levantar la nueva catedral, la actual, según los planos de un arquitecto nombrado Antonio Masella, de origen saboyano.

El celebre vasco y hombre de empresa Domingo de Basavilbaso, hombre de confianza del obispo y bienquisto de la ciudad, en 1754 se hizo cargo de la tesorería y dirección de la obra del nuevo templo. La nueva catedral, según el plano de Masella, sería de cruz latina, con tres naves y seis capillas laterales a ambas.

La catedral se fue edificando con los bienes (muy parcos) de la iglesia y con la cooperación económica del pueblo. Pero, aunque un poco tardía, la ayuda real empezó a llegar en 1760. ¿A qué se debía este atraso? "Indudablemente, dice un autor contemporáneo-, poco interés tenía el monarca en ayudar al obispo Marcellano en su obra, por cuanto éste impedía los planes de quienes, desde la corte de Madrid, conspiraban contra la compañía de Jesús, siguiendo las directivas de las logias, sin sospechar que estaban haciendo el juego a los planes de la corte de Lisboa, que veía en las reducciones jesuíticas un obstáculo insalvable al avance portugués en América". Las obras, sin embargo, se iban realizando, tanto que en 1758 se pudo inaugurar la llamada nave de San Pedro, la que se halla a la derecha de la puerta de entrada, y también el nuevo bautisterio.

Don Cayetano Marcellano y Agramont, que tanto había hecho por la nueva catedral en 1759 tuvo que dejar el gobierno de esta diócesis por haber sido trasladado a la sede arzobispal de Charcas. Su sucesor, el porteño José Antonio Basurco (1760-61) ocupó sólo un año la sede bonaerense, pero hizo también su obra contribuyendo a la prolongación del templo al donar el terreno de una casa, contigua a la iglesia, pertenencia de su hermana, doña María Josefa Basurco, tasado en 7.500 pesos, que pagó de su peculio personal.
Una dificultad sobrevino en 1770, en que al detectarse grietas en la media naranja o cúpula, fue necesario proceder a su demolición. Al cabo de siete años las obras tuvieron que suspenderse porque también se había suspendido la ayuda estipulada en 6.000 pesos. En 1778 fue demolido el pórtico porque no concordaba con las proporciones del edificio de la catedral; también fueron demolidas las torres por no estar de acuerdo con el estilo del templo.

Fue el penúltimo obispo de Buenos Aires, don Manuel Azamor y Ramírez, quien puso cima a las obras de nuestro templo catedralicio en lo que se refiere a lo principal de él y lo inauguró el 25 de marzo de 1791, treinta y ocho años después de iniciada su reconstrucción en 1753. La catedral fue consagrada en 1804 por el último obispo de la era hispánica don Benito de Lué y Riega, quien se empeñó en agregarle lo que aún le faltaba: el frontis y las torres. Las obras se comenzaron en 1804, pero en 1807 hubieron de suspenderse por falta de numerario.


Pasados los años, independizado ya el país de la Metrópoli, el gobierno de Martín Rodríguez en la persona de su ministro Rivadavia puso un gran interés en la conclusión de las obras de la catedral. Al respecto, se sabe con certeza que las del frontis se comenzaron el mes de enero de 1822.

En este punto hay que salir al paso de un error que ha tomado cuerpo entre nosotros. Se dice que el encargado de terminar el templo, el francés Próspero Catelin, al levantar la columnata del frontis tuvo a la vista la de la Magdalena de París. Pero si confrontamos una y otra, constatamos en seguida que en realidad no fue así. En primer lugar, la Magdalena tiene ocho columnas y la catedral de Buenos Aires doce. En segundo término, las obras de la Magdalena se concluyeron el año 1842 y por tanto no podía tomarse como modelo lo que aún estaba por concluir en 1822.
Según el arquitecto Buschiazzo más bien parece que Catelin "se hubiese inspirado en el Palais Bourbon, cuya fachada tiene también doce columnas y que acababa de ser terminado por el arquitecto Poyat en 1807". Las doce, columnas, número con el que quiso representar a los doce apóstoles, se concluyeron en 1823, aunque sin capiteles y sin las esculturas del tímpano. Las columnas se revocaron tardíamente, en 1862, y ese mismo año, el escultor francés Dubordieu realizó esculturas del tímpano en que representa al encuentro de José y sus hermanos, alusión al encuentro de los argentinos después de la batalla de Pavón en 1861. Las columnas son del orden corintio.
Por último, no hay que olvidar que la catedral fue declarada monumento histórico el 21 de mayo de 1942.

Fuente:http://www.catedralbuenosaires.org.ar/historia6.htm

Los Blandengues



-¡Cuánta historia tienen nuestros pueblos Bonaerenses!! Unidos entre sí por caminos que en tiempos pasados eran polvorientos e intransitables a más de fangosos en épocas de lluvia; tanta historia que a menudo resulta desconocida para los propios pobladores. De esos tiempos juega un papel muy importante el ganado vacuno-cimarrón, ese que llega con los españoles y que se prolifera de una manera vertiginosa por los campos, también la agricultura y el indio con sus malones.

Pero de estos factores, los otros protagonistas de esta historia fueron Los Blandengues, aquel cuerpo de milicias de caballería de la frontera de Buenos Aires y que fue el primer antecedente y base de la formación de nuestro ejército Nacional, anterior a Patricios (pues éstos nacen en víspera de la primera invasión inglesa 1806 mientras que los Blandengues ya tenían 54 años de antigüedad nacen en 1752). Fueron sus primeros integrantes vecinos que acudieron al pronto llamado para organizarse entre sí y combatir al malón indio que arrasaba poblaciones, matando y llevándose cautivos: Mujeres y niños; gracias a ellos, los Blandengues aseguraron, gradualmente, las fronteras bonaerense, pero también dieron origen a nuevos poblados y a cientos de caminos que hoy atraviesan las llanuras bonaerenses. Defendieron y combatieron las tres fronteras: la interna con el indio, la terrestre contra los portugueses y la marítima contra Inglaterra; lo siguieron al general Belgrano donde combatieron en el Paraguay; al General San Martin en el imponente cruce de Los Andes para llevar libertad a otras tierras Americanas. Pertenecían a ese grupo de milicia que también recorría la zona que abarcaba desde Buenos Aires hasta el río salado controlando el insipiente contrabando que en toda esa franja de tierra se cometía. Sus presencias estuvieron en los tiempos difíciles de la primera invasión inglesa 1806 donde una compañía compuesta de 100 hombres al mando del Teniente Coronel Manuel Gutiérrez llega al puerto de la Ensenada para defenderlo y proteger su batería, Nuestra Señora de Las Mercedes. Después de la primera década del siglo XVIII y a partir del año 1715 (aproximadamente) se producen en el territorio bonaerense unos procesos que van a marcar hechos determinantes: la Ganadería (aquellos vacunos que llegan con los primeros colonizadores y que se van reproduciendo de una manera rápida), y El Indio: Que con sus malones causaban el flagelo sobre las pocas poblaciones ubicadas en distintas zonas del territorio; estos factores van a provocar grandes cambios en toda la extensión de la llanura. La captura de ese ganado salvaje o cimarrón provocó una importante disminución del mismo, por la misma consecuencia dio origen a la creación de establecimientos (estancias) para contenerlos y a la dedicación de la exportación de cueros. Eran tiempos muy difíciles para el territorio bonaerense para tener una vida en paz; los indios Araucanos, que venían de Chile, habían comenzado a cruzar la cordillera y convencían a los otros pueblos aborígenes para avanzar decididamente hacia la llanura y Buenos Aires y en forma de arreo, llevarse hacia Chile, grandes cantidades de cabezas de vacuno, factor que provocaba una gran disminución del mismo en la Pampa (recordemos a algunos de aquellos temerarios caciques como Hecanantù y Carumlomko). Fue todo un verdadero conflicto generalizado a tal punto, que se produce un enfrentamiento armado con los Españoles dando lugar, a un largo proceso de lucha que recién finalizará, décadas después, con ese proceso conocido, históricamente, como “Conquista del Desierto” (de la mano del General Julio A-Roca 1879).Las líneas de fronteras pasaron a ser una verdadera preocupación para las autoridades de Buenos Aires, por consiguiente, esas líneas y su protección, mas la ocupación del desierto tomaron las características de una conquista y expansión militar. El territorio conocido como Pampa tiene una extensión, aproximadamente de, 700 Km2 de Este a Oeste y de 1000Km2 de Sur a Norte, vale decir que es una gran zona fértil donde nuestro país ha desarrollado, a través del tiempo, una gran riqueza agrícola-ganadera que se remontan desde los tiempos de las dos fundaciones de Buenos Aires 1536 y 1580 respectivamente; las expediciones colonizadoras introdujeron al territorio caballos y vacunos de los cuales, como ya he mencionado, se fueron reproduciendo con gran rapidez. Es en el siglo XVII donde se producen las mayores riquezas y explotación ganadera además, se comienzan a brindar los primeros permisos de “vaquería” o“cacería; en 1620 con el nacimiento de las estancias se producen dos instancias: el lugar donde se criaran los animales de una forma controlada y donde se los “marcaran “para diferenciarlos de otras estancias. Entre los años 1710 a 1812 es cuando se producen el incesante robo de ganado por parte de los indios Mapuches, Araucanos, Pehunches, tehuelches, hacia Chile, llevados por pasos cordilleranos desde el Neuquen; una vez allí, con todo el ganado robado, lo comercializaban con los Españoles que en forma clandestina exportaban los cueros hacia distintas direcciones(destaquemos que los indios, por lo general, no comían la carne vacuna sino de yeguarizos), era evidente que con estos actos, estaba demostrado la enemistad que había entre las distintas jurisdicciones administrativas, es decir: Chile era Capitanía General de Puertos, y la Gobernación de Buenos Aires un lugar sin importancia, un extenso territorio que abarcaba, ambos lugares, el Virreinato del Perú. Entrado el siglo XVIII, y con todos estos antecedentes, además el indio y sus malones que cada vez más se atrevía en sus correrías, comienza a comentarse la idea de organizar una fuerza de milicias capaces de adaptarse a las durísimas condiciones del desierto defender las fronteras de Buenos Aires y combatir al indio. Se tomó como antecedente a aquellas milicias nacidas en 1724, en la Provincia de Santa Fe, conocidas con el nombre de “BLANDENGUES porque sus efectivos “BLANDIAN” (movían sus armas) a modo de saludo cuando desfilaban frente a las autoridades, los vecinos, allí reunidos, comenzaron a llamarlos así, y de esta manera, la historia los conoció desde entonces. No tenían uniformes (en sus comienzos) vestían a la usanza de campo y sus armas eran: una lanza y un sable para el combate cuerpo a cuerpo, carecían de muy poca instrucción militar, recordemos que eran vecinos lugareños unidos por el deseo de defenderse del indio y sus malones; a pesar de todo, cumplieron con gran éxito sus funciones defensivas y así continuaron hasta 1799. El Teniente Coronel y hacendado Juan Francisco BASURCO del poblado de Arrecifes, una de las fronteras más castigadas por el malón, presenta un proyecto al cabildo de Buenos Aires para formar algunos escuadrones de caballería Blandengues para combatir y proteger las fronteras del ataque de los indios; el proyecto fue aprobado el 18 de Febrero de 1751 donde se resuelve formar dos escuadrones con 50 hombres cada uno con el sistema de “enganche “y “permanente” con el propósito de asegurar la continuidad del servicio por el que fue creado; se llama a formar sus filas, se nombran a sus oficiales, suboficiales y tropa; la constitución efectiva se va llevar a cabo recién el 16 de Abril de 1752 cuando se produce el alistamiento completo y el pago de la primera compañía (se van a alistar tres)se nombrara a un jefe al cual recayó en el Capitán José de Zárate, a esta compañía se la llamo “La Valerosa” y se instaló en las márgenes del río Lujan (hoy ciudad de Mercedes). El 21 de Junio de 1752 quedo pronto lista la segunda compañía al mando del Capitán Isidro Troncoso y Lira, a la misma se denominó “La Invencible “destinada a cumplir servicios en la localidad de Salto; el 8 de septiembre de 1752 quedó alistada y complementada la tercera compañía al mando del Capitán Juan Blas Gago se la llamó “La Atrevida” y fue destinada a prestar servicios, en la laguna de Lobos para luego trasladarse (por una cuestión operativa) hacia la zona conocida como el Zanjón ( hoy la ciudad de Magdalena), allí cambió su nombre y pasó a denominarse “La Conquistadora,“es de destacar, que el Capitán Gago era el Comandante General de las tres compañías cumpliendo con esta función de 1752 hasta 1766. Los hombres que integraban estos cuerpos de Blandengues, eran de todo el territorio, pero en especial, de las zonas de Santiago del Estero y del Paraguay, región que pertenecía por entonces, a las Misiones Jesuitas y abarcaba lo hoy serían las provincias de Chaco, Formosa, Corrientes, Misiones, entre otras. Sus hombres eran subordinados, valientes, y de contextura física ideal para el cumplimiento de sus funciones como soldados, muy distintos al personal que ingresaba, muchos años después, al regimiento de Patricios, cuando nace en 1806, todos eran, o al menos en su gran mayoría, de Buenos Aires. Como vemos y por antecedentes, son los Blandengues, el antecedente primero y base del nacimiento de nuestro Ejército Nacional, algo que rara vez se dice o que el olvido trata de ocultar, al tal punto es el grado de su importancia y reconocimiento, como una estructura, militar que, el propio Rey Carlos III de España, eleva al Cuerpo de Caballería Blandengues con una REAL ORDEN del día 3 de Julio de 1784 al rango de “TROPAS VETERANAS”, esto significa que se les “RECONOCE “al cuerpo de milicias “Blandengues de las Fronteras de Buenos Aires como a una “UNIDAD MILITAR”, distinción que solamente daba el Rey a todos esos cuerpos militares que se organizaban expresamente por su indicación. A pesar del tiempo transcurrido desde aquel momento, ese reconocimiento Real, está en “Vigencia”. De allí que el vestir su uniforme y saber de su pasado, nos tiene que llenar de orgullo, dignidad, honor y respeto, porque somos una representación y materialización de cada uno de aquellos hombres que, con tantas vicisitudes y desde su lugar de combate, buscaron la paz, la justicia y libertad del territorio. Una vez estructurados formalmente, recibían sueldo que provenía de la Real Hacienda y auxilios a la vejez o por enfermedad; además se les otorgaba pensiones a las viudas y a los huérfanos. Vestían uniformes muy vistosos: casaca corta de color azul con collarín o sobrecuello rojo, chupa, solapas y vueltas del mismo color, chupetín y calzón (pantalón) de color rojo en invierno y blanco en verano; adornaban la casaca botones blancos y vestían sombreros tricornios para las fiestas y otro, más chico, tipo andaluz corto, que los usaban para el combate, ambos sombreros debían usar una cinta encarnada cocida en la copa de los mismos y una cucarda(tipo escarapela)de color rojo, sus botas, algo ajustadas, eran de cuero de becerro que le llegaban a la altura de las rodillas con formato de polainas; en invierno cubrían sus cuerpos con poncho. Su equipo de combate (armamento) consistía en: un caballo (que ellos debían comprar) fundamental para el tipo de servicio que realizaban y que además debían cuidar, mantener y renovar, todo lo hacían de su propio sueldo lo mismo que a todo su recado de montar; Contaban con una lanza de tres varas (2 metros y medio de largo aproximadamente) la caña de construcción era de la localidad de Calihué, completando su armamento personal un sable aconsejable para la lucha cuerpo a cuerpo, un mosquete corto de caballería y pistola, ambas armas de fuego eran de avancarga. Recordemos que cuando se crean los cuerpos Blandengues, era Gobernador de Buenos Aires Don José de ANDONAEGUI, que dicho sea de paso, teniendo este precedente, la guardia de honor del gobernador de nuestra provincia tendrían que ser Los Blandengues y no otros. Una vez organizados los cuerpos, sus compañías y colocados en sus apostaderos de guardia, inmediatamente comenzaron a construirse una línea de fortines(estos servían para colocar detenidos y prisioneros de guerra); estos fortines y guardias armadas fueron las bases y dieron origen a nuevos pueblos y caminos que aun hoy perduran, a pesar del tiempo transcurrido, en la Provincia de Buenos Aires y fueron los Blandengues con sus familias, sus primeros pobladores, algunos ejemplos podemos citar: Guardia de Samborombón o El Zanjón (hoy ciudad de Magdalena), Fuerte de Nuestra Señora del Pilar de Los Ranchos (actual ciudad de Ranchos), Guardia de Lujan (hoy ciudad de Mercedes), Guardia de San Miguel del Monte (hoy ciudad de Montes), Guardia del Juncal (gobernador Udaondo), Fortín de Nuestra Señora de las Mercedes y fortín de San Lorenzo de Navarro (hoy ciudad de Navarro), Fuerte San Juan Bautista (hoy ciudad de Chascomús), Fortín San Pedro de Lobos (hoy ciudad de Lobos), Guardia de San Francisco (hoy ciudad de Rojas), y así tantas otras que figuran en los documentos históricos. No solamente que éstos grandes olvidados, Los Blandengues, se formaron para combatir al indio y a sus malones que arrasaban con todo a su paso, también combatieron a los portugueses con el correr del tiempo. Portugal ejercía presión con su pensamiento colonizador y también expansionista, Los Bandeirantes son los que atacan y destruyen a las Misiones Jesuíticas, (los Padres Jesuitas los combaten y los vencen, uno de esos combates es el de Mbororè 11/03/1643,donde estos religiosos desplazan una estratégica brillante pues los ayudaba su pasado milita que les daba esa capacidad militar) además de penetrar en la Banda Oriental al Sur de los ríos Quareim y Yaguarom en busca de ese ganado cimarrón que está pastando en los campos Uruguayos, ellos penetran y no respetan absolutamente nada de lo pactado y determinado en el tratado de Santa Catalina, Los Fazendeiros(grandes terratenientes y comerciantes) que ayudados por las autoridades Portuguesas, pretenden instalarse en el Río de La Plata, fundan, en el siglo XVII, la Nova Colonia do Santísimo Sacramento para competir y dominarle el lugar a los Español (recordemos que entre los años 1680 y 1683 es el momento principal en que los Portugueses colonizadores del Brasil establecen la mayor cantidad de asentamientos en la zona)estos no intentan desalojarlos sino hasta 1723 cuando los Portugueses comenzaron a fortificar las alturas que rodean a la bahía de Montevideo; una expedición militar Española, que sale de Buenos Aires, los obligó a abandonarla y fundan en 1726 la ciudad de Montevideo. La rivalidad entre España y Portugal finaliza en 1777 cuando España toma la soberanía (por intermedio del tratado de San Ildefonso) del territorio Uruguayo bajo la jurisdicción del virrey quien tenía su sede en Buenos Aires. Cuando fallece el Rey de España Fernando VI de Borbón el 10/8/1759 termina la delación entre las casas reales de los reinos de España, pero fundamentalmente fallece sin darse cuenta de la gran importancia que tenían estas colonias en el Río de La Plata; recién Carlos III, en su reinado, se va a concientizar de la gravedad de la presencia Portuguesa en la zona, crea en 1776 el Virreinato del Río de La Plata y nombró al Capitán de Navío Don Pedro de Cevallos como primer virrey que llegó al mando de 17 navíos y un total de 9.500 hombres permaneció en su cargo por espacio de dos años. A todo esto las milicias, entre ellas, Los Blandengues, cumplían sus funciones de vigilancias costeras en toda la franja terrestre que comprende desde Buenos Aires, pasando por el puerto de la Ensenada de Barragán, hasta el río salado, en 1771 el Cuerpo de Blandengues sumaban un total de 1524 efectivos. Con la llegada del segundo virrey a Buenos Aires, Don Juan José Vértiz, vuelve a reorganizar estructuralmente al regimiento Blandengues, es decir que queda formado por seis compañías de cien hombres cada una y su jefe pasa a ser Comandante del fuerte y Comandante de fronteras ejerciendo poder en una amplia jurisdicción con autonomía para decidir cuestiones judiciales y militares; podían designar misiones específicas con jefaturas a cargo de sargentos o cabos para controlar al indio, reconocer tropas de carretas, arrìas, pasajeros, licencias, represión a los contrabandos, designar prisión para los delincuentes, decomiso de géneros, oro y plata embargo de ganado, cobro de licencia por tránsito de ganado, bienes y bultos, y en los lugares limítrofes cumplían funciones de aduana seca, además confeccionaban sumarios a presos militares o civiles aún por causas que atentaban contra la moral. La caballería Blandengue recorría continuamente las fronteras y sus fortificaciones servían como lugar de concentración de prisioneros, (se producían muchas deserciones entre sus filas, posiblemente para volver a sus actividades civiles o por lo sacrificado que resultaban sus funciones de milicianos bajando sus autoestimas), organiza también, una línea de fronteras con pequeños fuertes y dentro de ellos colocar una guarnición de blandengues al mando de un Capitán, un Teniente y un Capellán( el primero que oficio en el Cuerpo de Blandengues fue Fray Hilario Pavón en 1761 perteneciente a la orden Mercedaria), cuatro sargentos, ocho cabos, un tambor, dos vaquean y ochenta y cinco plazas de tropas blandengues que hacían un total de cien plazas con uniforme propio y armados con mosquete de caballería, dos pistolas y un sable. Practicaban tiros de fusilería tanto a pie como a caballo, al paso, al trote o al galope, y el adiestramiento en el manejo del sable; supervisados por un Comandante y dos Ayudantes colocados a la derecha e izquierda o a la derecha y centro de la línea (según la estrategia de combate) con una severa orden de mando e instrucción. De ésta manera se logró colocar al Cuerpo de Blandengues en un estado respetable de organización y con la capacidad para algo más que combatir al indio. Los fuertes y fortines que se iban construyendo estaban protegidos por un foso en todo su contorno, con una profundidad de dos metros y dos metros de ancho, contaba con un portón de madera levadizo en troncho terraplén de adobe y tierra inclinada para evitar que se desmorone, además de contar con un cerco de palos a pique; en el medio se levantaba un mangrullo de poste de unos ocho a diez metros de altura donde se ubicaba el centinela, dentro del recinto se encontraban los ranchos (viviendas), el corral de los caballos y un pozo de agua. Fuera del recinto estaban los pobladores y sus viviendas más las nuevas que se iban sumando (ranchos). Como era tradicional desde tiempos pasados, los pueblos se formaban y crecían alrededor de las fortificaciones militares. El esfuerzo hecho, por las autoridades coloniales, para la construcción de los fuertes, fue muy grande, se estima, aproximadamente, que se gastaron un total de 200.000 pesos fuerte, a pesar que se recibió mucha contribución de dinero que no fue contabilizado en su momento, por otro lado los estancieros que aportaban en especies debido que en la Pampa bonaerense no había demasiada madera y piedras de manera tal que todo había que ser llevado en carretas desde la costa del río Paraná y desde Melincué hasta la desembocadura del río Salado en una extensión de 450km de Pampa abierta. ¿Cómo poder cubrir y defender un territorio tan grande? No bastaban con las Compañías de Blandengues, se empleaban el sistema de “milicias”civiles, es decir, gente que trabajaba la tierra, campesinos, que bajo la conducción de uno de ellos que sobresalía por su comportamiento, capacidad y afecto que se le tenía, poseía el grado de Sargento Mayor y estaba bajo las órdenes del Comandante del fortín que cuando las circunstancias lo requerían, este le indicaba que formara a sus milicianos, dejaban de trabajar la tierra y empuñaban las armas para combatir al indio, no todos concurrían. El malón indio aparecía de sorpresa, no se sabía el momento, salvo por algunas circunstanciales delaciones era imposible ser detenido cuando entraba al territorio a robar los poblados y estancias, llevarse mujeres y niños y asesinar a los hombres, entraba a gran velocidad pero cuando se retiraba con el ganado y todo su botín, su marcha era lenta razón por la cual se les podía dar alcance antes que entraran al desierto y cruzaran el río Salado hacia el sudoeste. Por lo general los malones atacaban a varias estancias y el aviso que se daban entre los habitantes, permitía la organización del Cuerpo de Blandengues y milicias para sus defensas; los malones se realizaban en verano, época del año donde el río Salado no tenía muchos pasos buenos y justos para que pudieran cruzar grandes cantidades de ganado, allí, en esos pasos, los Blandengues y milicianos esperaban al malón y los combatían con gran éxito que lograban recuperar gran parte del ganado robado y muchos cautivos (mujeres y niños). El indio fue, desde aquellos tiempos y hasta la segunda mitad del siglo XIX un verdadero problema para los poblados debido a sus incursiones y al constante peligro que ello significaba para sus gentes, se los descuido a ellos y a las fronteras debido a varias circunstancias que exigieron ser atendidas: Las Invasiones Inglesas 1806 y 1807; de allí en más y a partir de 1810 con el nuevo Gobierno Patrio, las sucesivas guerras de la Independencia, posteriormente el enfrentamiento entre Unitarios y Federales(guerras civiles en nuestro territorio), posteriormente la Guerra con el Brasil 1825-1828 y por último la Guerra contra Paraguay 1865-1870, todo este tiempo se postergó y se descuidó la lucha ofensiva contra el indio y sus correrías, aquella lucha que propusiera en su momento, y muchos años antes, el virrey Pedro de Cevallos y luego prosiguiera Juan José Vértiz (segundo virrey de Buenos Aires)hasta llegar al año 1878 cuando, siendo Presidente de la Nación Nicolás Avellaneda, su Ministro de Guerra General Julio A. Roca vuelve a retomar la idea de Cevallos proponiendo una gran ofensiva contra el indio y sus malones hasta exterminarlos definitivamente. Pero ya no estaban aquellos soldados que usaban fusiles de avancarga lentos y pesados, pero útiles en sus momentos, sino que estos soldados cargaban sobre sus hombros fusiles con cartuchos llamados Rémington a repetición. Desde su primer Comandante que fue José de Zárate hasta el último de origen Español Antonio de Olavarría (padre de quien fuera un guerrero de nuestra independencia José de Olavarría) y desde 1752 a 1810 (precisamente hasta el 29/05/1810 en que cambian su nombre por Caballería de La Patria) el histórico y Veterano Regimiento de Caballería Blandengues de las Fronteras de Buenos Aires, con 58 años de trayectoria para esa última fecha, cumplieron perfectamente con sus tareas por lo que fueron creados, combatieron al malón indio, a los contrabandistas que azotaban los puertos, a los Portugueses que ambicionaban dominar estos territorios, a los Ingleses en la Ensenada de Barragán destacados allí para defender su puerto y Batería; también lucharon frente a frente con el invasor en el combate de Pedriel 01/08/1806 en vísperas de la Reconquista de Buenos Aires, acompañaron al General Belgrano combatiendo en Paraguay y a Balcarce al Alto Perú (hoy Bolivia) también cruzaron Los Andes acompañando al General San Martín y dar libertad a otros pueblos. Tanto fue el éxito de estos Cuerpos de Caballería Blandengues, por la efectividad de sus acciones que, el 6 de Diciembre de 1796, siendo Virrey Don Pedro de Melo, y por una Real Orden del Rey de España Carlos IV, donde se dispone la creación de un Cuerpo de Blandengues para Montevideo con iguales características que las de Buenos Aires: funciones, uniformes y armamento; su primer Comandante fue el Sargento Mayor Cayetano Ramírez de Arellano y la única unidad estaba formada de ocho compañías de cien hombres cada una que, en 1801 y durante el sitio de Montevideo por los Portugueses, fueron aniquiladas por completo.-


AUTORIDADES Y COMANDANTES DEL CUERPO DE BLANDENGUES ENTRE LOS AÑOS 1752-1907

GOBERNADOR DE BUENOS AIRES: José de Andonaegui (gobernó entre 1745 y 1758)

Cap. José de Zárate (Comandante de La Valerosa) de 1752 a 1753

Cap. Isidro Troncoso y Lira (Comandante de la Invencible) de 1752 a 1753

Cap. Juan Blas Gago (Comandante de la Atrevida) de 1753 a 1766.

Comandante General

Cap. Juan Ignacio de San Martín y Avellaneda (desde 1766 a 1769)

Cap. Manuel de Pinazo (desde 1769 a 1780)

Sgto. Mayor Juan José Sarden (desde 1780 a 1789) Comandante de Frontera

Tcnl. Francisco Balcarce (desde 1789 a 1793)

Tcnl. Francisco González Balcarce (desde 1793 a 1794)

Tcnl. Nicolás de la Quintana (desde 1794 a 1806) Comand. Gral. de Frontera

Tcnl. Antonio de Olavarría (desde 1794 a 1810) Comand. Gral. de Frontera. Fue el último Jefe de origen y natural de España.-



En el año 1810 el cuerpo de “Blandengues” cambia de nombre por “Caballería de la Patria” se sucedieron, por esa década, tres comandantes a saber:

Tcnl. Esteban Hernández

Cnel. Antonio de Olavarría

Cnel. Antonio González Balcarce


En la década de 1820 vuelve el glorioso regimiento de caballería a lucir su nombre de origen “Blandengues de La Frontera de Buenos Aires “y en los tiempos de Bernardino Rivadavia el 10/6/1826 le vuelve a cambiar el nombre por el de “Regimiento de Caballería de Línea Nº 6”,una fugaz recuperación del nombre en los tiempos de Juan Manuel de Rosas, pero vuelve a desaparecer quedando un recuerdo lejano de las” veteranas tropas”, el 01/07/1964 queda oficializado, en un regimiento de nuestro Ejército Nacional, el nombre de “Blandengues “vuelve a cambiar su nombre en 1969 por “Regimiento de Caballería de Tiradores Blindados Nº 6,” en el año 1980 se llamaran “Regimiento de Caballería de Tanques Nº 6”, en 1992 se los conocerá como “Regimiento de Caballería Nº 6 Escuela” y finalmente desde el día 06/06/2003 se llaman: ”Regimiento de Caballería Blindada Nº 6 BLANDENGUES” perteneciente a la Brigada II General Justo José de Urquiza con asiento en la localidad de Concordia Provincia de Entre Ríos.


DESDE EL AÑO 1823 SUS COMANDANTES FUERON:

Tcnl. Miguel Cajaraville (desde 1823 a 1826)

Cnel. Mario Ibarrola (desde 1826 a 1829)

Cnel. Juan Izquierdo (desde 1829 a 1830)

Sgto. Mayor Mario Espínola (desde 1830 a 1833) Comandante interino

Tcnl. Nicolás Benier (desde Abril de 1833 a septiembre de 1833)

Tcnl. Roque Cepeda (septiembre de 1833 a noviembre de 1833)

Cnel. Prudencio Rosas (noviembre de 1833 a 1844)

Tcnl. Mariano Salas (1862 a 1863)

Tcnl. Liborio Muslera (1863)

Tcnl. Mariano Charras (1863 a 1864)

Tcnl. Matías Olmedo (1864 a 1868)

Tcnl. Juan Jobson (1868 a 1874)

Tcnl. Clodomiro Vilar (1875 a 1882)

Tcnl. Manuel Sosa (1882 a 1885)

Tcnl. Alfredo Cabot (1885 a 1888)

Tcnl. Juan Méndez (1888 a 1895)

Tcnl. Martín Hernández (1895 a 1903)

My. Camilo Gay (1903)

Tcnl. Juan Razeti (1903 a 1907)

BIBLIOGRAFÍA CONSULTADA

Archivo General de La Nación: Cabildo de Bs. As 1751-1752. Tomo IX, Folios 321-348.-

Archivo General de La Nación: División Colonia –Sección Gobierno. Reales Células Legajo 23 (1777-1778).

Marfany, Roberto. Los pueblos Fronterizos en la época colonial.

Levene, Ricardo. Historia de la Provincia de Bs. As y formación de sus pueblos. La Plata: Archivo Histórico de la Pcia. De Bs. As- Tomo I. 1940.

Barba, Enrique. Origen y Evolución de Arrecifes . Archivo Provincia de Bs. As. 1974

“Política seguida con el aborigen” (1750-1819) Bs. As. Circulo Militar Tomo 1. Ejército Argentino –Comandancias General 1973.


Fuente:http://www.granaderos.com.ar/articulos/art_blandengues.htm