martes, junio 29

Los códices de la Biblioteca Nacional de Francia en DVD

MÉXICO, D.F., (apro).- Con el título Amoxcalli (La Casa de los Libros), la antropóloga Luz María Mohar Betancourt inició hace seis años un proyecto para digitalizar el llamado Fondo Mexicano de la Biblioteca Nacional de Francia (BNF), que contiene 80 códices y manuscritos, con el fin de ponerlos a disposición del público en un DVD.

El proyecto cuenta con el apoyo y la participación de diversas instituciones, entre ellas el Centro de Investigaciones y Estudios Superiores en Antropología Social (CIESAS), del que es investigadora Mohar Betancourt; la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM); la propia BNF, que accedió a entregar copias facsimilares de los acervos, la Universidad Veracruzana; y el Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH), el cual dio a conocer los avances del proyecto.


Explica que se trata de 80 códices y manuscritos, de los cuales el 60 por ciento es “inédito”, pues “nunca habían sido estudiados”, por ejemplo las genealogías de las Familia Cane y de los Principios mexicanos, así como el códice Xochimilco y el Mapa de Coatlán.

Otros documentos son los códices Xólotl, Mexicanus, del Proceso de Cuauhtitlan, Aubin, Cozcatzin, Azcatitlan, Ixtlixochitl, Testeriano, el plan topográfico de Hueyapan, Historia Tolteca Chichimeca, Genealogía de los príncipes mexicanos, Confirmación de Calpan, Historia de Ayotzingo, Descripción iconográfica del Palacio de Moctezuma, Lienzo de Tetlama, y Carta geográfica del Valle de México, de Siguenza.

Trabajan en el proyecto de digitalización, análisis e interpretación más de 70 investigadores, entre ellos Noel de Jesús Rodríguez, Bérénice Gaillemin, Rosalba Sánchez, Sonia Angélica Hernández Rodríguez, Joel Ortiz, Miguel Ángel Recillas, Eustaquio Celestino, Rita Fernández, Laura Rodríguez, Cecilia Rosell, Manuel Hermann, Elías Caracas, Brigitta Leander, Eréndira Camarena, Rodrigo de la Torre y Gerardo Bustos.

Antes del Amoxcalli, Mohar Betancourt realizó junto con Marc Thouvenot, el proyecto Machiyotl, cuyo propósito fue elaborar diccionarios de glifos, personajes y elementos de nueve códices que fueron respaldados en disco compacto. En este caso, los documentos provenían de la BNF, el Archivo de Indias de Sevilla, y los museos Británico y Alfeñique de México.

Vale recordar que existe también un antecedente: En 2004 el periodista y fotógrafo Miguel Gleason editó en CD-Rom una cantidad de códices de la misma BNF, entre los que pueden mencionarse el Xólotl, Chimalpopoca, Huichapan y Jilotepec, bajo el título El patrimonio mexicano de Francia.

Al dar a conocer este material, Gleason destacó que, después de México, Francia es el país con mayor cantidad de códices, aunque aclaró que no todos prehispánicos, pues algunos son de la época colonial.

En ello coincide Mohar Betancourt, quien explicó que la biblioteca, con sede en París, posee más de 300 documentos de culturas asiáticas, donde se incluyen los documentos de la historia de México que datan de los siglos XVI al XVIII. Uno de los códices pertenece a la época prehispánica, el París, y el resto es de la época colonial y están escritos en español y lenguas indígenas. Se incluyen en el fondo asiático porque los franceses consideran que no pueden catalogarse como acervos occidentales.

El trabajo que Gleason dio a conocer en 2004 puede consultarse en la página web www.sup-infor.com, donde se ofrecen diversos textos en lenguas náhuatl, otomí, mixteca y maya, además de diccionarios de estas lenguas al español o viceversa. Es el caso del Dictionnaire de la langue nahuatl classique, de Alexis Wimmer.

En dicho sitio web se pueden leer fragmentos del códice Xólotl, como la crónica Quetzalcóatl y el espejismo de Tollán, que relata:

“Estamos en 1519. Tras muchas aventuras y batallas, Hernando Cortés con su tropa de conquistadores llega por fin a México Tenochtitlán, la poderosa capital del imperio azteca. Pero allí, no hay lucha. El rey o emperador Moteczuma le espera y acogiéndole amistosamente, le coloca collares de flores y le abraza. Luego se le dirige en términos asombrosos.”

El proyecto de Mohar Betancourt se presenta en el ciclo de conferencias Códices Mexicanos en la Biblioteca Nacional de Francia, que se lleva a cabo los lunes de junio y julio, a las 19:00 horas, en el auditorio Fray Bernardino de Sahagún del Museo Nacional de Antropología.

En el libro México su apuesta por la cultura (Proceso-Grijalbo), el historiador Miguel León-Portilla, destaca en un texto la importancia de los códices:

“En los códices prehispánicos que se conservan hallamos la posibilidad de asomarnos a lo que fueron las creencias, las fiestas, cómputos calendáricos, predicciones astrológicas, relatos históricos, visión del mundo y recursos económicos de una civilización originaria que floreció en aislamiento a través de milenios. A su vez, en los códices que continuaron elaborándose después de la invasión española saltan a la vista no pocas realidades que fueron consecuencia del encuentro de culturas muy diferentes: imágenes que cabe calificar de mestizas, en las que lo indígena convive con lo europeo en su versión hispánica.”

Son, pues, una ventana al pasado, que ahora se recuperan con las tecnologías del presente.
Judith Amador Tello
proceso.com.mx

No hay comentarios.:

Publicar un comentario